El diccionario de la lengua define turista como toda persona que se desplaza hacia otras regiones o países distintos del propio con la finalidad de pasar allí momentos de ocio, conocer otras culturas, visitar lugares específicos que están ausentes en la región de residencia habitual. En la tipología del turismo hay varios términos que se pueden aplicar al puerto, durante un gran periodo de tiempo fue un poderoso destino de negocios y de a poco esta recuperando esa presea, sigue siendo más claro como destino de playa, así como cultural, religioso a nivel regional y, de vez en cuando, deportivo. Desde sus inicios Mazatlán fue visitado por marinos extranjeros que dejaban sus impresiones en la bitácora del capitán, por aventureros que deseaban llegar a las minas de California y, claro, por personajes reconocidos en las esferas internacionales. A continuación se extiende una lista con diez de los muchos visitantes que ha tenido el puerto desde su establecimiento. ¿De cuál otro te acuerdas?
1. Herman Melville
El autor de Moby Dick arribó a Mazatlán entre marzo y abril de 1843 como naviero de la marina de guerra estadounidense, apenas dos años antes de que el puerto fuera invadido por sus compañeros durante la guerra de intervención estadounidense en México. Sus impresiones del puerto las recogería en una parte de su novela autobiográfica Chaqueta Blanca, publicada en 1850. En 1855 tocaría de nuevo el tema del puerto argumentando: Todos vinieron a Mazatlán en aquel tiempo, no sólo norteamericanos, si no también los británicos, alemanes, rusos y franceses. La ciudad era conocida por su entorno hermoso, sus atractivos edificios, banquetes elegantes, magníficos bailes y magníficas mujeres.
2. Ignacio Ramírez El Nigromante
El periodista, poeta y político liberal, uno de los más importantes durante la guerra de reforma y la intervención francesa, pasó diferentes y breves momentos en Mazatlán, dejando sus impresiones en las cartas que le enviaba a Guillermo Prieto:Ciudad caprichosa que da saltos graciosos sobre la colina del cuartel y la casa de la pólvora; y mojando un pie en Puerto Viejo y otro en las Olas Altas, se inclina para verse sobre las aguas que juegan con mi buque. Critico, describe al Mazatlán de 1863 desunido por nacionalidades, el contrabando y la falta de servicios. Quizá la carta más importante que escribió llevaba como fecha el 31 de marzo de 1864, cuando atestiguó la batalla de los mazatlecos contra la Cordelliere.
3. Henry Edwards
Quizá el menos conocido de la lista, sin embargo no por ello menos importante. El actor, escritor y entomólogo inglés que respondía a este nombre, pasó su vida presentando obras shakesperianas, escribiendo sus propias sátiras y catalogando insectos a lo largo de sus viajes por el mundo, actividad que solía combinar bastante bien. En 1975 quiso la suerte que llegara a Mazatlán y se hospedara en el famoso hotel Nacional donde, según dice en sus cartas, estudió las arañas y cucarachas que anidaban y volaban en su habitación, respectivamente, muy común en aquella época. El resto de sus textos referentes al puerto son de especial valor, ya que describen la vida cultural y artística previa a la construcción del actual teatro Ángela Peralta.
4. Francisco Villa
En 1897, cuando el futuro revolucionario e improvisado político no era más que un joven de entre dieciocho y diecinueve años dedicado al hurto con la gavilla de Ignacio Parra, conoció por primera vez el puerto, donde, atestiguó el propio Villa, conoció el mar y se quedó muy admirado. El puerto que acompañaba ese mar era un Mazatlán opulento, de mansiones recién construidas por alemanes, franceses, italianos, españoles y otros extranjeros, un poco más recuperado del que conoció el Nigromante. Varios años después, en 1912, volvería a visitar el puerto, esta vez de paso y muy de prisa ya que venía huyendo de las autoridades desde Ciudad de México y aun quedaba lejos El Paso, Texas.
5. Francisco I. Madero
Este otro revolucionario llegaría, allá por 1909, para pedir el apoyo de los votantes. Mazatlán cargaba una herencia de periodistas y luchadores liberales, representada en esos momentos por el escritor y militar Heriberto Frías. Sin embargo, las autoridades del puerto pusieron varias trabas para que no logrará su cometido: formar un comité antirreeleccionista. Sus compañeros consiguieron rentar la carpa del circo Atayde, proveniente de Villa Unión, donde lograron reunir a 2,000 simpatizantes. Al día siguiente, sin encontrar otro lugar para el mitín por amenazas del jefe político del puerto, la gente se arremolino en el hotel Central, donde se procedió a nombrar al comité antes de la partida de Madero hacía Culiacán.
6. Pablo Neruda
El nobel de literatura chileno, uno de los más grandes poetas del siglo XX, cuando era cónsul de Chile en México, entre 1940 y 1943, visitó Mazatlán y agregó sus observaciones en el poema Puertos de América en su extenso Canto general: Mazatlán estrellado, puerto de noche, escucho las olas que golpean tu pobreza y tus constelaciones, el latido de tus apasionados orfeones, tu corazón sonámbulo que canta bajo las redes rojas de la luna. El puerto que describe Neruda se encontraba envuelto en la guerrilla regional entre dorados y agraristas que culminarían con la muerte del gobernador durante un baile de carnaval. En ese momento Mazatlán solo contaba con un hotel frente al mar y un malecón que llegaba hasta el paseo Claussen.
7. Walt Disney
Una de las visitas más curiosas y, extrañamente, menos recordadas por los mazatlecos fue la que hizo el famoso creador de Mickey Mouse y su Disneylandia. El hecho es que el reconocido caricaturista y cineasta no planeaba llegar al puerto, como tampoco nunca más lo volvió a hacer. En realidad se dirigía a la Ciudad de México, donde tendría una entrevista con el presidente para la realización de una película. Sin embargo, ese año de 1943, ocurrió en el puerto un ciclón de dimensiones catastróficas que detuvo el viaje de Disney, aterrizando forzosamente en el aeropuerto, donde casi es destruido con los pasajeros aun dentro, para posteriormente refugiarse en el hotel Belmar durante tres días.
8. Jack Kerouac
Tal vez uno de nuestros más extraños visitantes fue aquel escritor beatnik, drogadicto profesional, que buscando experiencias místicas llegó a Mazatlán a bordo de un camión destartalado entre 1950 o 1952. Aquí visitó uno de los ya conocidos fumaderos de opio, donde nos cuenta que los lugareños le veían extrañados, casi xenofóbicamente, sospechando de su procedencia como si fuera un agente secreto del FBI. Después, continua, iría a parar a una cantina donde se emborracha frente al Cerro de la Nevería, platica con los pescadores de historias donde luchaban contra gigantescos peces y mira danzar a los surfistas en la playa. Todo esta experiencia mística la inmortalizaría, a modo de parada, en su obra On the Road.
9. John Wayne
Como ya sabrán, cuando se abrió el hotel Playa en la aun despoblada Zona Dorada, Mazatlán no pasaba de 40,000 personas y apenas rebasaba en proporciones el cerro de la Nevería. Cuando Hollywood decide abrir su estudio western en Durango, muchos de sus actores venían al puerto varias veces al año mientras rodaban sus películas, aprovechando el relativo anonimato que les daba este destino. John Wayne solía anclar su yate Ganso Salvaje a un lado del faro y pasar medio año, entre idas y venidas, en el hotel Belmar, en donde siempre tenían la habitación 48 reservada para él, y en el hotel Playa. Otros actores que visitaron Mazatlán por esa época fueron John Barrymore, Rita Hayworth, Tony Curtis y Rock Hudson.
10. Ronald Reagan
Terminamos esta lista con el primer, quizás el único, mandatario extranjero en funciones que ha visitado el puerto. En su gira del adiós escoge Mazatlán para despedirse de México como presidente de Estados Unidos. Aquí se reuniría con su homologo en turno Miguel de la Madrid para discutir, según los medios oficiales, el mercado de los textiles mexicanos, pactos en telecomunicaciones y aviación civil. En realidad, esa decada fue muy movida para ambos presidentes por un tema muy escabroso, el narcotrafico, que dejó una crisis diplomática entre sus países cuando el Cartel de Guadalajara, antiguo Cartel de Sinaloa, secuestró, torturó y asesinó a un agente de la DEA. Quizá discutieron esto cuando pasaron a un lado del Frankie-Oh!
AUTOR: Fernando Meraz FUENTE: Docediezmeraz.wordpress.com
