El mercado Pino Suárez cuyo nombre original era Mercado Manuel Romero Rubio fue construido durante el año 1898 y 1900. Fue financiado por el ayuntamiento y al contrario a un mito que se tiene no fue diseñado ni construido por Gustave Eiffel, el famoso ingeniero francés, el diseño estuvo a cargo del Ing. Alejandro Loubet Guzmán.
Ing. Alejandro Loubet Guzmán era Mazatleco (de padre francés y madre mexicana), y era el director de la Fundición de Sinaloa, empresa emblemática del Mazatlán del siglo XIX. Usó la técnica del hierro fundido de moda a partir de Eiffel y su torre. Loubet estudió ingeniería en Francia y en EEUU por lo que eso puede explicar el porqué la similitud con los diseños del ingeniero Francés.
El Mercado Pino Suárez aunque no fue construido por Eiffel sigue siendo un impresionante edificio con estilo Art Noveau y es parte de la historia de Mazatlán.
Los cambios al mercado Pino Suárez
El mercado Pino Suárez sufrió muchos cambios con el paso de los años. En los primeros años de existencia del mercado, sobre la calle Benito Juárez existía una amplia explanada, que se utilizaba para instalar los puestos de menudo, por las mañanas y las cenadurías, por la tarde.
Después de 1910, las banquetas y el exterior del mercado empezaron a poblarse de puestos. En 1917 el ayuntamiento autorizó por primera vez la instalación de puestos fijos alrededor del mercado, inicialmente en la explanada.
Originalmente la explanada estuvo sembrada de arboles de la región. En 1923, el ayuntamiento acordó su pavimentación y la reordenación de los puestos ubicados allí.
La explanada, además de dar cabida a innumerables puestos, era utilizada para efectuar desde bailes en tiempos de carnaval hasta mítines políticos.
Para finales de los años 40 del siglo XX, el mercado quedó rodeado de puestos que obstruían la visibilidad del enrejado original propio del estilo con el que fue construido
La construcción y la distribución de los puestos externos eran anárquicas y empobrecían la imagen exterior de las fachadas del edificio.
Con todo, durante la primera mitad del siglo XX, el Mercado se convirtió en el eje comercial de la ciudad.
En 1951 se realizaron las obras para darle una nuevo aspecto al mercado.
Gracias a Enrique Vega Ayala, Cronista de la ciudad por la información.